Resultado rápido

Me gustan las grandes ciudades, perderme entre la gente, ver caras desconocidas. Pasear, observar, sentirme distinta y libre.
A veces paseo por la ciudad donde vivo, apenas conozco a gente, apenas conozco sus rincones y de alguna forma puedo sentir esa libertad que te da el anonimato de la gran ciudad.
Esta mañana, cuando estaba inmersa en la calle más trascurrida, alguien, casi sin darme cuenta ha dejado un papel en mi mano:

Vidente
Gran profesor africano
Soluciona cualquier problema de amor, negocios, suerte, futuro, potencia sexual.
Te ayuda a recuperar tu pareja, amarle, fuerte atracción, unión y separación.
Resultado rápido.


Hay que ver lo fácil que es todo y lo pronto que se soluciona la vida con unos polvitos mágicos del Gran profesor africano. Qué suerte. Aunque mejor lo voy a dejar para los desganados. Yo prefiero seguir descubriendo lo que soy capaz de hacer cada día, no quiero aburrirme tan pronto. El futuro, al final, lo hacemos nosotros.

Un café

Me gustaría sentarme en un café lleno de gente y verme entrar. ¿Me reconocería? Si así fuese…¿seguiría siendo la misma?
Me gustaría sentarme en un café lleno de gente y sin conocerte verte entrar. ¿Me conocerías? ¿seguiría siendo la misma?
Entra en el café, déjame conocerte y cuéntame un cuento.

Que no se me olvide

La interpretación del silencio: cuando no se puede establecer un diálogo y la vida transcurre en un monólogo es difícil saber cuando se va por el camino correcto o cuando no. La falta de respuesta verbal a ciertas actitudes distorsiona la verdad.

El juego de la mentira: tengo que aprender las reglas para no seguir perdiendo.

Escuchar canciones de desamor: Iván Ferreiro y sus “Canciones para el tiempo y la distancia”: ….el doctor me recomienda que no me quite el abrigo, que no esté ya más contigo y yo no puedo negarme pues el tipo soy yo mismo…dejemos que corra el aire y digámonos adiós….

Volver a la realidad que ya es hora.

Esta noche cerraré la puerta con cuatro llaves y me daré una vuelta por mi nube a poner todo en orden.

Me dejo llevar

Un día, un año. Se acaban de marchar los últimos amigos de un día que no quería que fuese y que ha sido. Los últimos amigos que han venido a felicitarme en un día, por un año más. Quería que pasase desapercibido. Me alegra haberme dejado arrastrar. Día de fiesta y regalos, noche de tertulia en la terraza, con el fondo de grillos y el cielo estrellado.

Espejismo

Vuelvo a caer, me quito el polvo y me levanto, otra vez, una vez más. Sin temor me lanzo al mar como un náufrago sin isla. En el vaivén de las olas vuelvo a percibir un espejismo. A lo mejor el espejismo soy yo. Algún día te encontraré, descansaré y me curarás las heridas. Y serás real. Yo también lo seré y no me creerás.

El abrazo del olvido

Lleno de risas, inesperado y deseado. Abrazo cálido, lleno de besos, pasión y deseo olvidado.
Y de descanso, de sueño y pereza, de principio, de ilusión. Abrazo sin fin, sin principio, compartido, envidiado y merecido.
Y el baile, Camarón.
Miradas robadas, besos de colores con sabor a salitre del mar del norte en el sur con la lluvia inesperada y fresca.
Y la luz en mis ojos.

montaña rusa

Estos días mi vida es algo parecido a una montaña rusa. Lo mismo estoy arriba del todo con un vértigo alucinante que bajando a toda mecha con la adrenalina a tope y cuando parece que ya estoy a ras de suelo, vuelta a subir, con la consecuente emoción de no saber qué es lo que puede venir (peligro de shock incluido).
Reconozco que me gustan los retos, las cosas difíciles, pero no sé si no me estaré excediendo con tanta voltereta, que ya cansa y a lo máximo que quiero aspirar es, como mucho, a una mecedora cuando quiera emociones fuertes.
Es lo de las vueltas que le comentaba a mi querido amigo virtual Giovanni. La vida da vueltas, muchas vueltas. Cuando todo parece que empieza a asentarse, empieza a girar sin saber a dónde te va a lanzar el centrifugado.
Quizás ahí está la ilusión, la vida. Qué aburrido sería pensar que todo va a ser igual siempre. Despertarte cada mañana sabiendo lo que te espera, aunque ésto sea lo mejor.
Mi vida fue así.
Un día dio una vuelta.
Desde entonces no ha parado de girar.
Desde entonces no tengo tiempo para llorar.
Desde entonces me sorprendo todos los días.
Y sobre todo, desde entonces, encuentro la felicidad en las cosas más pequeñas y la saboreo intensamente.