jueves, abril 27, 2006

Un café

Me gustaría sentarme en un café lleno de gente y verme entrar. ¿Me reconocería? Si así fuese…¿seguiría siendo la misma?
Me gustaría sentarme en un café lleno de gente y sin conocerte verte entrar. ¿Me conocerías? ¿seguiría siendo la misma?
Entra en el café, déjame conocerte y cuéntame un cuento.

7 Comments:

Blogger giovanni said...

La siguiente tarde Bruno llegó como primero en Gran Caffé La Caffettiera. Se asentó a la mesita de costumbre, al lado de la ventana, y poco después vió a Daniela acercándose de una manera graciosa. Ella estaba de muy buen humor, que a él le contagió.

(fragmento de mi novela, que muestra que no podría traducirla bien.)

1:12 p. m.  
Blogger la-de-marbella said...

La tarde siguiente, Bruno llegó el primero al "Gran Café La Caffettiera". Se sentó en la mesita de costumbre,al lado de la ventana, y poco después vió a Daniela acercándose de forma graciosa. Ella estaba de muy buen humor y él se sintió contagiado.

Bueno casi casi, podias traducirla solo. La ultima frase ... "Ella estaba ..... se podría traducir de varias formas más sin perder el sentido de o que quieres decir. Saludos.

2:01 p. m.  
Blogger nube de colores said...

Entran ganas de apender idiomas para poder leer tu novela, gracias por traducir este trocito. Qué encanto tienen los cafés, llenos de desconocidos, mientras esperas y garabateas algo en la servilleta para entretener la mirada y las manos.

2:18 p. m.  
Blogger la-de-marbella said...

Perdona Nube, yo queria escribirte a tí y se me fue con Giovanni.

Mi historia de cafeteria: Conocí a Manuel telefonicamente durante 12 años, jamas nos vimos las caras. Cada día de 8 a 3 nos comunicabamos a causa de nuestro trabajo del orden de las veinte veces. Tenía la voz más bonita y arrebatadora que haya oido jamas. Pues bien, un día en la barra de un bar y tras haber perdido la pista de Manuel,(cambios de trabajo etc)oí su voz, y estuve a punto de volverme a ver su cara, tenía tantas ganas que tuve que agarrarme a la barra. Sin embargo la voz de Manuel tenía rostro en mi cabeza y quizas la realidad no coincidiese con mis expectativas. Con lo que tome aire, pague la copa y salí del bar sin mirar atras. y ESO ES todo.

2:26 p. m.  
Blogger nube de colores said...

Luis me haces recordar una canción de Jorge Drexler "De amor y casualidad" que le tiene que gustar a Giovanni por lo mundano que es, empieza así: Tu madre tiene sangre holandesa,
yo tengo el pelo sefaradí,
somos la mezcla de tus abuelos,
y tu, mitad de ella y mitad de mí.
El padre de tu madre es de Cádiz.
Mi padre se escapó de Berlín.
Yo vengo de una noche de enero,
tu vienes de una siesta en Madrid.

Me ha encantado tu historia marbellera.

10:08 p. m.  
Blogger giovanni said...

Gracias Nube por la invitación de contar un cuento y gracias La-de-marbella por la corrección de los errores. Había escogido un fragmento apto (por la entrada) y fácil de mi novela. El primer encuentro entre Bruno y Daniela se dió en el mismo café, por una mirada. Me encanta la letra de la canción de Jorge Drexler. Y a mí también me encanta la historia marbellera.

12:42 p. m.  
Blogger gonzalvo said...

Gracias nube por el comentario y el enlace.

Me gustó lo que vi en el tuyo.

Un saludo zaragozano.

8:57 p. m.  

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